“Al bebé le dispararon varias veces y nos obligaron a mirar”: sobrevivientes de la masacre en Minatitlán

 “Al bebé le dispararon varias veces y nos obligaron a mirar”: sobrevivientes de la masacre en Minatitlán

El hecho ocurrió dentro de una palapa en el municipio veracruzano; al parecer buscaban a “El Becky”, dueño de un bar

Infobae/Explanada Noticias

Sin piedad alguna, un comando armado ejecutó a 14 personas en una fiesta en Minatitlán, Veracruz a tan sólo 48 horas de la visita del presidente de México a esa entidad, donde los asesinos no tuvieron corazón alguno y dispararon varias veces a una indefensa criatura de tan sólo un año de edad.

Esta tragedia sacude a Veracruz y el país entero, luego de las narraciones de los sobrevivientes a la masacre, quienes no dieron crédito de lo que les había ocurrido, cuando un comando armado de entre 5 a 7 personas irrumpió de manera violenta en una palapa donde se celebraba el cumpleaños 52 de una mujer, que terminó en un sangriento festejo.

Los hechos se registraron en la colonia Obrera, a un costado de la refinería Lázaro Cárdenas, en el municipio de Minatitlán, en el estado de Veracruz. “A los que estaban agachados les decían que voltearan a ver, y a los muertos les volvían a disparar, te decían que los miraras, lo hacías y te gritaban que voltearas, fue algo espantoso, horrible, nunca en mi vida había visto tanto odio, tanta maldad en los corazones de los hombres, que Dios los perdone, pero que la justicia del hombre haga su trabajo”, narró una de las personas que presenciaron la masacre.

Aún con la llegada de las Fuerzas Armadas, la violencia en la entidad continúa imparable. En su reciente informe, el Secretariado Ejecutivo dio a conocer la cifra de incidencia delictiva nacional en la que Veracruz reportó 4.033 delitos tan sólo en el mes de febrero.

“Perdóname Dios por estar en esta fiesta, en este día tan sagrado, padre nuestro que estás en el cielo, hágase tu voluntad”, rezaba una señora mientras las armas de seis hombres seguían disparando. “Yo sentí que mi corazón se quería salir del pecho, estaba muy asustada, sólo la oración me daba consuelo”, concluyó.

Ayer, más de una decena de personas, entre ellas un menor de edad, fueron asesinados por un comando que irrumpió una fiesta, en un poblado donde los distintos cárteles mantienen una guerra por el territorio.

Según los reportes policiales, el grupo armado buscaba a “El Becky”, señalado como propietario del bar “La Potra”, rentado para la celebración del cumpleaños de una mujer. Aunque el hombre no se encontraba en lugar, el grupo comenzó a disparar a quemarropa contra los invitados.

“Casi todos se tiraban al suelo, y ellos les decían que se voltearan a verlos. Que los vieran mientras les dispararon para matarlos”, confesó una de las invitadas, y quien perdió a su hermano en los hechos.

Fuentes ministeriales revelaron que los occisos fueron identificados como: Alfredo Meugniot, Felícitas Cabrerar Gil, Juan René López, Hebert Reyes, Ana María Santos, Raúl Palacios, Leobardo Salinas, Julio César Váquez, César Hernández, Julio César González, Patricia Cabrera Ramos, Irma Barrera y Marco Aurelio Davis, éste último murió en el hospital.

En los últimos años los veracruzanos han enfrentado la guerra entre los cárteles de Jalisco Nueva Generación, Los Zetas y El Golfo que se disputan el territorio sureño.

El gobernador de la entidad, Cuitláhuac García, aseguró que la causa de la violencia ha sido que el poderío de los seis cárteles es más grande que el de la policía municipal.

Lo más abrumador de este violento hecho es que a los sicarios no les importó nada en privar de la vida a un menor de tan sólo un año de edad, que, de acuerdo con la versión de los testigos y sobrevivientes de esa masacre, los sicarios caminaban de un lado a otro, pero al pasar a un lado del cadáver de la criatura, estos le volvían a disparar, lo remataron la menos en cuatro ocasiones, sin piedad, como un muñeco de trapo, destrozándolo por completo.

El lugar quedó bajo un manto de sangre, como una alberca, y los cuerpos de las 14 víctimas regados a lo largo y ancho de la palapa, con huellas de haber sido golpeados con las culatas de las armas de alto poder que portaban los asesinos, para después masacrarlos frente al resto de los invitados.

Explanada

Relacionados

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *